Cómo preparar la tierra para sembrar
Cómo preparar la tierra para sembrar ⭐ Sigue estos consejos para dejar el terreno a punto para la siembra ✅.
Abril es uno de los meses clave para los huertos y el campo, es el mes del renacer de la naturaleza y el de volver a sembrar para poder tener una buena cosecha. Para ello, es imprescindible que se prepare la tierra antes de la siembra, de ello dependerá que lo que sembremos crezca fuerte y sano, o por lo contrario, la cosecha no sea lo que esperábamos.
En este artículo queremos explicaros cómo preparar la tierra para sembrar y algunos trucos y consejos para hacerlo de forma eficaz. ¡Sigue leyendo!
5 pasos para preparar la tierra para sembrar
Es muy importante que los pasos que vamos a detallar a continuación, se realicen cada año antes de sembrar, ya que de un año para otro, la tierra se resiente por la lluvia, el frío y el calor, lo que provoca una mala circulación del agua y aire en la tierra, además que la tierra se desgasta en nutrientes. Si quieres obtener una buena cosecha el próximo año, sigue los siguientes consejos:
Identifica el tipo de terreno donde vas a sembrar
Es algo en lo que no se suele pensar cuando se va a preparar la tierra y es vital conocer las características del suelo donde se va a sembrar, ya que nos va a ayudar a saber qué necesita para estar siempre en equilibrio. Podemos dividir los tipos de terreno en dos grandes grupos:
- Tierras arenosas.
Este tipo de tierra permite una evacuación del agua rápida, por lo que es perfecta para aquellos cultivos que necesitan mucha humedad. Una de sus ventajas más importante es que permite una elevada oxigenación de las raíces, gracias a esa capacidad de drenaje que posee.
- Tierras arcillosas.
Estos tipos de terrenos tienen una alta capacidad para retener el agua, pero no tienen tanta capacidad de drenaje, esto es algo que repercute de forma negativa en la oxigenación y en la salud de las raíces.
Lo ideal para el terreno es conseguir un equilibrio entre el terreno arcilloso y el arenoso. Este equilibrio, en el estado natural, es muy difícil de encontrar.
Elimina las malas hierbas del terreno
Antes de realizar cualquier otra labor en la tierra, es muy importante eliminar las malas hierbas del terreno, ya que pueden entrar en conflicto con el resto de plantas por los recursos del agua. Si el cultivo va a estar destinado a productos de alimentación, lo ideal es prescindir de cualquier tipo de químico para eliminar las malas hierbas, lo suyo es quitarlas de raíz.
En realidad las malas hierbas nunca se van a eliminar por completo y suelen volver a aparecer días después de regar, este puede ser el momento perfecto para quitarlas, ya que todavía no tendrán fuerza en la raíz para agarrarse en condiciones al suelo.
Airea la tierra antes de sembrar
Esta es una de las tareas encargadas de oxigenar la tierra, para ello, es necesario que la tierra esté húmeda. Podemos aprovechar después de un día de lluvia o mojar la tierra antes de airearla, de esta manera se puede trabajar mucho más fácil.
Se debe cavar alrededor de 20-25 centímetros de la superficie, sacando toda la tierra y moviéndola. Podemos aprovechar para echar fertilizantes en la tierra, así estará rica en nutrientes antes de la siembra.
Allana el terreno tras la aireación
Una vez que ya está el terreno aireado y con el fertilizante, es el momento de allanar o nivelar el terreno para que la tierra presente un aspecto fino y unificado. Para ello lo ideal es utilizar un nivel láser y postes, para marcar la nivelación exacta del terreno.
Abona y enriquece la tierra para dejarla lista para sembrar
Aunque le hayamos echado fertilizantes al terreno, no está de más echarle más nutrientes, para ello, lo mejor es aportar al suelo materia orgánica que ayude a enriquecerlo, como el humus de lombriz o el estiércol. Estos pueden ser los últimos puntos para preparar la tierra para sembrar.
Esperamos que este artículo os haya servido para entender cómo preparar la tierra para sembrar.
¡Hasta la próxima!